Fasnia
En tiempos de la conquista, este pueblo pertenecía al mencey Acaymo de Güímar y lindaba con la extensa comarca de Abona o Chasna.
Hay menciones de diferentes escribanos, en el siglo XVI, a Fasnia, indicando que estaba habitada por auténticos guanches y que los conquistadores no se habían aventurado más allá de Güímar. Algún viajero de la época informa de la existencia de cuevas que servían de vivienda.
Hay diversas versiones sobre la aparición del patrón de la parroquia, San Joaquín; en todo caso, figura como que fue cambiado por un animal, probablemente un baifito. La imagen fue colocada en una cueva, siendo posteriormente trasladada a la iglesia vieja.
La ermita de San Joaquín perteneció a la parroquia de San Pedro Apóstol, de Vilaflor, y luego a la del Lomo de Arico, hasta que en 1796 adquiere la categoría de parroquia. Deciden entonces los vecinos la construcción de una nueva iglesia en su actual emplazamiento, obra que se quemó en 1918 y fue reconstruida.
Ya tenía Fasnia alcalde pedáneo cuando la erección de la parroquia y en 1814 su territorio se segrega del de Arico. En documento de 1923 se habla de la disolución del Ayuntamiento existente y de la creación de un nuevo, que, inicialmente, tuvo que reunirse en casas particulares al carecer de una propia.